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La cantante estadounidense lanzó el pasado febrero su primer documental “The World’s a Little Blurry”, cuyo título hace referencia a su canción “ilomilo”.
Con una duración de 2 horas y media y bajo la dirección de R. J. Cutler, el documental (estrenado en Apple TV + y algunos cines del mundo) cuenta el comienzo de la carrera de Billie Eilish, hasta llegar a los premios Grammy de 2020, de una manera cruda e íntima, sin ocultar nada al público.
La historia comienza en 2016, cuando Eilish lanza su primer single, “Ocean Eyes”, y gana fama instantánea con tan solo 14 años. Tres años después, la cantante se encuentra en su gira “Where’s My Mind?” mientras finaliza su primer álbum “When We All Fall Asleep, Where Do We Go?” junto a su hermano Finneas.
Mientras lleva a cabo las grabaciones del disco en una pequeña habitación de su casa de la infancia en California, Billie Eilish (aún menor de edad) nos hace conocer a su familia, sus miedos más profundos, su relación con Brandon Q Adams y cómo lidia con síndrome de Tourette, entre otras cosas.
Con el lanzamiento del álbum, el éxito musical de la adolescente es casi instantáneo. “When We All Fall Asleep, Where Do We Go?” debutó en el número 1 en Billboard 200 en abril de 2019, y su single principal “Bad Guy” alcanzó esa misma posición en el Hot 100 en agosto de ese año.
Pocos días después del lanzamiento, Eilish se presentó como una de las artistas más importantes en el reconocido festival Coachella. Su documental muestra cómo fue la previa al show y un pequeño encuentro con Katy Perry y Orlando Bloom antes de subir al escenario. Eilish fue una de las artistas más habladas de esa noche. Sin embargo, ella se muestra decepcionada luego del show debido a problemas técnicos y el haber olvidado letras de sus canciones.
Un día después de eso, la cantante cumple uno de sus sueños más grandes al conocer a Justin Bieber, a quien admira desde pequeña. Las cámaras toman toda esa situación y se ve a Eilish completamente emocionada por las palabras del cantante canadiense. Se puede ver cuánto significa él en su vida y se muestra que mantienen una muy buena relación.
Otro punto destacable del documental es como se muestra a la cantante lidiar con constantes heridas en sus ligamentos y músculos del pie. Una de ellas se dio en septiembre de 2019, en el festival Milano Rocks. Eilish se lastima en los primeros minutos de su show y debe sufrir el dolor durante el resto, mientras llora debido a la frustración.
La película cierra con imágenes de los Grammys 2020, en los cuales Billie Eilish ganó cinco de sus seis nominaciones, incluyendo todas las mayores categorías y superando así a artistas con carreras más extensas que la de ella. Se la ve completamente abrumada y feliz por eso, mientras que su hermano la apoya y celebra junto a ella. Luego de esto, se escucha “Ocean Eyes”, la canción que empezó todo, y se da fin al documental.
Con todas estas situaciones mostradas en pantalla, se puede ver a la cantante sin filtros y totalmente vulnerable. Las dos horas y media de documental se hacen amenas mientras aprendemos más sobre la adolescente que se apoderó de la industria musical en tan poco tiempo. Incluso si no se es fan, es clave ver “The World’s a Little Blurry” para entender mejor a los cantantes jóvenes de la industria pop y conocer su lado humano.
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